Usando la Astrología Medieval VI
Versión en Idioma Español autorizada por BENJAMIN N. DYKES, PHD, AMA, para la Escuela Internacional de Astrología
Dignidades
1. Domicilio (también llamado simplemente, el "Señor" de un signo). Esta dignidad es considerada de forma estándar como la más fuerte o la de mayor dignidad (pero véase "almuten" a continuación). Si un planeta está en un signo que rige por domicilio, indica a primera vista que el planeta es capaz de actuar de acuerdo con su naturaleza planetaria benéfico / maléfico, y significa lo que significa, con fuerza, completa y libremente - sobre todo cuando está en el signo de su propia naturaleza elemental (por ejemplo, Saturno en Capricornio, porque ambos son fríos y secos). Es capaz de operar de una manera estable y duradera. Morin agrega que los maléficos en el domicilio con frecuencia pueden conferir beneficios si están en una casa apropiada (es decir que no se conviertan en doblemente maléficos), aunque estos beneficios están acompañados por trabajo duro y obstáculos .El regente de un domicilio permite que un planeta sea más disciplinado y directo, que cuente para su potencial benéfico. Por ejemplo, si Marte está en su domicilio (en Aries o Escorpio) en la casa 10 (que regula las acciones de la profesión), podría mostrar éxito en la carrera del ejército o en la aplicación de la ley o el atletismo. Debido a que Marte es un planeta maléfico seguirá causando algunos problemas en forma de lesiones, conflictos y la agresión. Por otra parte, que todavía se trata de ganar, lograr la victoria, y nos gloriamos en las fallas de sus enemigos. Sin embargo, al estar en el domicilio en donde expresa normalmente su agresión, se canalizará de manera más productiva y exitosa. Planetas en el domicilio se dice que son como una persona en su casa y estado.
2. Exaltación. Esta dignidad es, técnicamente, la segunda más poderosa a saber, porque no es tan duradera como la regencia del domicilio. Pero esto significa que un planeta es capaz de alcanzar efectos de gran alcance, incluso un poco más potente (por el momento), como cuando el planeta está en el domicilio: considerar que uno puede subir de repente en la sociedad y recibir grandes honores, pero que tal honor puede desvanecerse. Planetas exaltados pueden mostrar a la gente de clase alta, buena suerte repentina de los temas que significan por su ubicación de la casa, pero los efectos están sujetos a frecuentes cambios. Los planetas en exaltación se dice que son como una persona en su mayor rango en su reino, con autoridad y posición de honor.
3. Triplicidad. Esta dignidad es la tercera en poder, y especialmente en la disponibilidad horaria sugiere de amigos y consejeros que pueden ayudar. Un planeta en un signo que pertenece a la triplicidad que él rige, se dice que es como una persona que tiene guardaespaldas, partidarios y ayudantes.
Los Regentes de la triplicidad están vinculados a "sectas", es decir, que la carta de un acontecimiento o una pregunta refleja un momento del día (secta diurna, regida por el Sol) o de la noche (secta nocturna, regida por la Luna). Cada triplicidad de signos se rige por varios planetas, uno de los cuales asume la regencia principal o exclusiva de una secta determinada. Originalmente había dos sistemas principales de regencias de triplicidad: una planteada por Dorotheus y otros astrólogos practicantes, y una planteada por Ptolomeo. Morin muestra otra versión de Schoener y agrega una de su autoría. Para Dorotheus los regentes de la triplicidad son tres. Que se pronunciaron y fueron utilizados por los astrólogos Árabes / Persas / y Judíos, y por lo tanto por los latinos medievales.
En cartas diurnas, cada triplicidad se rige principalmente por el regente principal, en segundo lugar por el regente secundario, y en tercer lugar por el regente participante. En las cartas nocturnas los regentes primarios y secundarios cambian de lugar: cada triplicidad se rige principalmente por el regente secundario, en segundo lugar por el regente principal, y en tercer lugar por el regente participante. El regente participantes siempre ocupa el último lugar.
En términos prácticos, los regentes de una triplicidad se utilizan de las siguientes maneras:
(a) Se cuentan por igual. Cualquiera de los tres regentes de la triplicidad puede contarse como "en la triplicidad”. Si está en el signo relevante de esa triplicidad, independientemente de si es de día o de noche. Así, si estamos evaluando a Saturno (el regente de la triplicidad en la que participan los signos de aire) para ver que dignidad tendrá "en su triplicidad" cada vez que se encuentra en cualquier signo de aire, ya sea de día o de noche.
Además, al evaluar que los regentes de la cúspide de una casa son más capaces de realizar lo que la cúspide significa, que incluyen los tres regentes de la triplicidad, junto con el domicilio, exaltación, términos, y decanato. Cualquiera de estos es el mejor y más fuerte y estará en mejores condiciones para realizar (aunque los regentes de la triplicidad, por su naturaleza no son tan fuerte como los regentes por domicilio o exaltación). Por ejemplo, supongamos que el Ascendente (ASC) está en un signo de aire. Si el regente por domicilio y exaltación está débil, nos fijamos en los tres regentes de la triplicidad. Si Mercurio (un regente de la triplicidad de los signos de aire) es el más fuerte, vamos a esperar que significa los intereses de los nativos, la felicidad, y mejor salud que los demás, independientemente de si la carta es diurna o nocturna.
Por último, a cada regente de la triplicidad se le concede el mismo número de puntos para ver cuál planeta es el regente más poderoso (el almuten) de uno o más grados del zodíaco (ver más abajo).
(b) Se utilizan en orden. En ciertas delimitaciones, los significados natal y la fuerza de cada regente de una triplicidad se utilizan para referirse a un tercio de la vida de los nativos, a su vez. Así que si el Ascendente está en Géminis en un nacimiento nocturno, el primer tercio de la vida se evalúa mediante Mercurio, el segundo tercio, Saturno y el tercero en tercer lugar, Júpiter.
(c) El regente primario es el preferido. En algunas delineaciones, el regente de la triplicidad primaria es solamente una evaluación, se hace caso omiso a los demás.
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